
La familia de Morris está conmocionada por lo ocurrido y por las imágenes que fueron difundidas rápidamente por redes sociales.
El pasado lunes, Khaseen Morris (16) fue asesinado tras recibir una paliza y varias puñaladas por parte de un grupo de jóvenes en los exteriores de centro comercial en Oceanside, Nueva York, Estados Unidos. De acuerdo a información de diversos medios locales, más 50 personas fueron testigos de lo ocurrido y lo grabaron todo, pero no intervinieron de ningún modo
El adolescente, quien murió en el acto tras recibir una puñaladas letal en el pecho, había recibido amenazas telefónicas por parte de los atacantes.
Morris, estudiante del centro de secundaria Oceanside High School, desde un principio fue el objetivo de los agresores. Según declaraciones de su hermana Keyanna a la cadena NBC New York, el joven fue asesinado por haber acompañado a una chica hasta su casa el sábado, después de una fiesta.
“La chica se lo dijo a su exnovio, le dijo “Oh, otro chico me llevó hasta casa”. Ella intentaba ponerlo celoso. Mi hermano no se lo merecería. Era la persona más pacífica y cariñosa del mundo”, aseveró.
La familia de Morris está conmocionada por lo ocurrido y por las imágenes que fueron difundidas rápidamente por redes sociales.
“Él era una persona que habría ayudado a cualquiera, y a él nadie lo ayudó. Es difícil de asimilar, algunas veces pienso que es sólo un mal sueño. Él era la luz y la energía de toda su familia”, precisó entre lágrimas Keyanna.
Según la hermana de la víctima, este había sufrido bullying con anterioridad, y que incluso tuvo que cambiar de escuela cuando la situación se agravó.
“Le dijo a mi madre que era la primera vez en mucho tiempo que se sentía tan feliz, porque había encontrado por fin una escuela donde podía ser él mismo, sin que nadie lo juzgara”, explicó.